Acerca del libro: 2013 / Chance le gastó una broma cruel a su nombre. La madre, apasionada de las series de televisión mexicanas, llamó a su hija Santana y la recepcionista “perdió” una letra. El nombre en el documento, por supuesto, fue corregido, pero la abuela Anna convenció a los padres para que dejaran a la niña con ella en el pueblo, para orar en la iglesia para eliminar el nombre "satánico" original y poner solo el bien, y no malo, en el niño. La abuela murió hace mucho tiempo, Sanka se mudó a la ciudad, creció, pero todavía no puede entender quién es ella realmente: buena o mala.…